Espiritualidad, Inspiración

¡El mejor entrenamiento para tus metas este año, al estilo Cliff Young!

 

Mientras saboreamos una deliciosa comida en viernes por la tarde, tengo los corazones de todos mis chicos, atentos a la historia de Cliff Young. Un granjero de Australia, que corrió su primer maratón a los 61 años de edad.

 

Por supuesto no era profesional, así que nadie le dijo que no podría correr con botas de granjero. Mucho menos que tenía que parar por las noches a descansar, al menos siete horas, para terminar los más de 875 kilómetros de distancia. –“¿Cuánto es eso papá?” – pregunta uno de mis hijos, con sus ojos curiosos.

 

                                                                                            Cliff Young

 

Quizás, tú y yo también tengamos algo de incertidumbre – como mi pequeño hijo – sobre cuántos kilómetros recorreremos este año. ¿Cumpliré mi sueños y propósitos? ¿Qué obstáculos enfrentaré? ¿Cómo resolveremos esta nueva situación o vieja relación, que aún se ve tan compleja, enredada, e inesperada? ¿Llegaremos al final de la meta este año, alegres y triunfantes?…

 

¿Cuántos kilómetros recorreremos este año?

¿Llegaremos al final de la meta este año, alegres y triunfantes?…

 

No he corrido un maratón (honestamente, aún no está en mi lista de propósitos) pero comienzo el año, dando mis pequeños y constantes pasos como Cliff Young, al lado de mi familia.

 

Lo expresa tan poético y sabio, mi querida Ann Voskamp:

“A veces el mejor entrenamiento para las cosas grandes,

son las cosas cotidianas.

 Más que resoluciones deslumbrantes,

necesitamos ritmos constantes.”

 

La invitación este nuevo año, es a retomar esos ritmos sagrados y constantes, que nos centran y sostienen en lo que al final anhelamos todos; más amor.

Cuidar el cuerpo, mente y alma, con esos hábitos que te regresan una y otra vez a tu primera verdad; ¡eres amado, eres amada. Eres valioso, eres valiosa. Lo que hagas o dejes de hacer en el mundo; importa, impacta!

Y cuando te vives desde esa gran verdad, al igual que Cliff Young, no hay noche, tragedia u obstáculo que te detenga. Simplemente sigues y seguirás con fe, manteniendo esos ritmos contantes y sagrados que laten como tu propio corazón.

¡Eres amado, eres amada. Eres valioso, eres valiosa.

Lo que hagas o dejes de hacer en el mundo;

importa, impacta!

 

                                                                   Cliff Young

 

Lo mejor de todo, es que en al recorrer tu camino, tendrás algunos grandes y valiosos compañeros, que darán aliento, ánimo, guía y consuelo. ¡Cuida a esos grandes amigos del camino, que te inyectan fuerza y vida, para continuar!

 

Cliff Young.

 

Mi esposo está asombrado con la historia. ¿Cómo es que a esa edad pudo correr un maratón, ganó la carrera, e incluso ganó un jugoso premio?…que terminó repartiendo entre todos los corredores. ¡Ahh, la cereza de las lecciones; la generosidad, la sencillez, la humildad!

Corremos la carrera de la vida, no sólo para “ganarnos” algo. Sino para darnos a alguien, a la mayor Gloria de Dios y al bien de muchos que se han cruzado o cruzarán contigo a la meta.

 

Acabamos de comer, mi esposo y yo regresamos a esos ritmos sagrados y constantes (escuchar la biblia en un año, caminatas en la naturaleza, momentos de conectar entre nosotros y con nuestros hijos, escribir, leer, amar) que mantendrán el corazón encendido hasta la gran meta final…

Quizás no corramos un maratón (aún), pero correremos este año, sabiendo Quién nos sostiene y alienta, a cada paso. ¡Dios te acompañe!

¿Y tú, cómo quieres correr este año?…

Con gran cariño y aliento,

Mariana López.

 

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¡Gracias por todas sus palabras de agradecimiento sobre cómo «La Danza de la Mariposa» va tocando su corazón! Que este libro también sea un gran acompañamiento para correr y danzar libres y ligeras, este nuevo año.

 

«Acabo de terminar de leer tu libro. Qué forma tan linda tienes de escribir, es un apapacho leerte. Gracias por compartir parte de tu historia, de tu camino y aprendizajes.

Pude espejearme en muchas cosas y también me cayeron varios veintes. ¡Muchísimas felicidades por este libro, se ve todo el corazón que le pusiste. Que sigan los éxitos y llegue a muchas personas.»

Tanya de la Rosa.

 

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La Danza de la Mariposa,

un llamado a dejarnos transformar por la ligereza del perdón

y la plenitud del amor.

 

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